Según se comprende, la reinserción social es un proceso estructurado de intervención psicosocial que intenta promover la integración a la sociedad de las personas que han sido condenadas por incumplir leyes penales.
Se ha realizado un trabajo de campo, muy profundo, como parte de una investigación desde la Psicología Social, que indaga sobre el poder de la lectura como factor de reinserción social en contextos carcelarios. Desde el orden jurídico cabe destacar lo prescripto en el artículo 5.6 del Pacto de San José de Costa Rica, donde se sostiene que la reforma y readaptación social de los condenados es la finalidad de la ejecución de las penas privativas de libertad.
La cárcel debiera ser un lugar de reaprendizaje, de readaptación, sin embargo, los ex reclusos acuerdan en que es un lugar feo para estar.
Todos describen un primer momento muy difícil, pero manifiestan que luego, con el correr del tiempo y con el desarrollo de actividades, se han logrado adaptar. Al respecto, en su artículo ̈Trabajo y cárcel ̈, Gago expesa:“Durante el encierro, se produce un complejo proceso de «socialización negativa», caracterizado por dos momentos distintos: la desculturalización, esto es, la desadaptación en la condiciones necesarias para vivir en libertad y la separación progresiva de los valores y los modelos de comportamiento propios de la sociedad externa; y la cultarización o prisionización, o sea, la asimilación de los valores y modelos característicos de la subcultura carcelaria, cuya interiorización es por cierto inversamente proporcional a las posibilidades de reinserción en la sociedad libre.
En relación a la pregunta sobre si creen posible la reinserción social, coinciden en que como las condiciones de vida son muy mala y violentas, de difícil que alguien ̈salga mejor de lo que entró.
Todos coinciden en que haber realizado actividades es de mucha ayuda con vistas a la reinserción social. Asimismo, apuntan a la necesidad de mejorar las condiciones de vida en el servicio penitenciario, para el logro de la resocialización de los reclusos.
Durante la entrevista, algunas de las preguntas apuntaban a indagar sobre su experiencia de lectura dentro de la cárcel y los cambios que los ex reclusos hubieran percibido de sí mismos a partir del desarrollo de esta actividad. También se inquirió sobre la función que para ellos tuvo esta práctica.
Respecto de esto último, aparece la idea de que la lectura los ayudó ̈a aislarse ̈(entrevista 1); a despejarse y entretenerse, haciendo más llevaderas las horas de reclusión (entrevistas 2, 5, 6, 8 y 10); como un “escape ̈, una manera de no sentirse encerrado (entrevistas 3 y 4); como una forma de ejercitar la mente (entrevista 7); atravesar el dolor a partir de esta actividad (entrevista 9).
En función de esto, los ex reclusos 3 y 4 asocian la actividad de la lectura con la libertad, ya sea en un caso porque a la entrevistada le recordaba a su vínculo con las amigas, que era mediado por la lectura, o porque constituía una forma de evadirse del encierro.
Todos mencionaron que experimentaron cambios a partir del desarrollo la práctica de la lectura. Entre ellos, destacan que descubrieron una actividad que nunca habían llevado a cabo –en su mayoría, no tenían hábitos lectores previamente- y que les daba gusto.
También, explicaron los entrevistados- siguiendo a Clemente- que la lectura les permitió hacer resurgir sentimientos estéticos.
Para finalizar, todos los entrevistados –a partir de la experiencia de la lectura- pudieron imaginar y proyectar para ellos un futuro fuera de la cárcel distinto a la vida que tenían antes de estar presos. Sobre este punto, cada uno fue planteando que les surgió la idea de conseguir un trabajo, relacionado este en general a las actividades que habían despertado interés en ellos dentro del ámbito carcelario.
En conclusión, por lo resultados comentados de las respuestas sobre la función de la lectura en la cárcel y cómo influyó sobre los ex reclusos, se puede afirmar que esta actividad tuvo mucho que ver con la capacidad de objetivarse y reflexionar sobre la vida y los actos de cada uno de ellos.
Asimismo, influyó positivamente en la manera de considerar su vínculos interpersonales ya que promovió la empatía mediante la identificación con las historias leías y los personajes que formaban parte de las mismas.
Referencias
- Clemente, J. E. (1964). Estética del lector. Buenos Aires: El Ateneo.
- Clemmer, D. (1968). The Prison Community. New York, Riley.
- Goffman, E. (1993) Estigma. La identidad deteriorada. Amorrortu Editores. Buenos Aires.
- Gago, L. M. (2010). Trabajo y Cárcel, Asociación Pensamiento Penal. https://www.academia.edu/2996976/TRABAJO_Y_CARCEL 10/03/2020
- Román, A. (2019). Imaginarios sociales de exreclusos sobre la lectura y el sentido de la vida: la función de la biblioterapia en personas privadas de su libertad (tesis doctoral). Universidad Argentina John F. Kennedy, Argentina. Pág. 192-198
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Román, A. M. (2020). Entrevista a reclusos sobre el proceso de reinserción social [día, mes, año de la consulta on line] https://antonioroman.info/entrevista-a-reclusos-sobre-el-proceso-de-reinsercion-social/