Cuando leemos una novela que nos conmueve, un poema que nos sacude o un relato que nos hace sentir comprendidos, algo profundo ocurre en nuestro interior. Más allá del deleite intelectual, la lectura despierta una compleja danza de emociones que transforma químicamente nuestro cerebro y cuerpo. Esta reacción no es metafórica: es biológica.
La neurociencia afectiva ha demostrado que la lectura significativa puede inducir cambios neuroquímicos reales —como la liberación de dopamina, oxitocina y la reducción del cortisol— con efectos positivos sobre el bienestar psicológico. Estas reacciones fisiológicas son una de las bases científicas que explican por qué la biblioterapia funciona: leer también es sanar.
La lectura no es solo un acto pasivo de recepción, sino una experiencia activa y transformadora.
“La biblioterapia es un proceso de interacción con los libros —y por extensión con otros textos— que encierre un contenido convocante, que le permite a una persona recrear y encontrar en ellos contenidos que dan sentido a su vida o que funcionan como mecanismos para sanar aspectos psíquicos.” Román, A. M. (2019).
Desde esta perspectiva, leer es mucho más que entender palabras: es reconstruir el sentido, habitar otras voces, explorar la memoria emocional y recuperar lo humano en un mundo acelerado.
Cuando la lectura se vuelve una dosis
Anna Lembke, psiquiatra y autora de Generación dopamina, narra su experiencia personal como lectora compulsiva de novelas románticas. Lo que comenzó como una búsqueda de placer y entretenimiento terminó convirtiéndose en una forma de evasión: leía en lugar de socializar, cocinar o dormir; incluso durante su trabajo clínico. La dopamina, liberada por la expectativa de un giro romántico o una escena erótica, reforzaba el comportamiento hasta convertirlo en adicción.
“Solo quería mi dosis, y estos libros, escritos siguiendo una fórmula, estaban diseñados para engancharme” (Lembke, 2022, p. 26).
Este caso muestra cómo el sistema de recompensa dopaminérgico puede activarse intensamente durante la lectura, especialmente cuando se busca una gratificación inmediata. En términos de biblioterapia, este ejemplo no sólo ilustra el poder emocional de los textos, sino también la necesidad de equilibrio: leer puede ser sanador, pero también puede convertirse en una vía de escape si no se acompaña de conciencia y reflexión.
Dopamina: el placer de descubrir
La dopamina es una catecolamina que actúa como neurotransmisor en el sistema nervioso central. Se sintetiza principalmente en las neuronas dopaminérgicas del área tegmental ventral y la sustancia negra. Interviene en procesos como la motivación, el placer, la recompensa, la atención y el aprendizaje (Bear, Connors & Paradiso, 2008).
Al leer una historia que nos fascina, una metáfora que nos deslumbra o un giro inesperado de la trama, el cerebro experimenta una gratificación real. Esto explica por qué la lectura puede ser adictiva (en el buen sentido): contribuye a mantener la motivación y el deseo de seguir leyendo.
Dopamina ejemplo literario: «La casa de Asterión», de Jorge Luis Borges
En este cuento, el lector acompaña a un narrador enigmático que vive aislado en una casa laberíntica. La revelación final —que el narrador es en realidad el Minotauro— resignifica toda la lectura y provoca una intensa recompensa intelectual. El proceso de deducción y sorpresa activa el circuito de recompensa dopaminérgico.
Borges, J. L. (1947). La casa de Asterión. En El Aleph (pp. 91–93). Buenos Aires: Emecé.
Aplicaciones biblioterapéuticas
- Estimular la curiosidad como motor de sentido.
- Trabajar la identidad desde múltiples perspectivas.
- Fortalecer la motivación lectora a través del placer estético.
Estructura molecular de la dopamina, neurotransmisor clave en el sistema de recompensa, asociado al placer, la motivación y el descubrimiento durante la lectura significativa.
Oxitocina: el vínculo con los personajes
La oxitocina es una hormona producida en el hipotálamo y liberada por la neurohipófisis. Si bien se conoce por su función en el parto y la lactancia, también está implicada en la formación de vínculos afectivos, la empatía y la confianza social (Bear, Connors & Paradiso, 2008).
Cuando un lector se conmueve con un personaje, se libera oxitocina. Esta reacción emocional es comparable a la que sentimos en relaciones reales, fortaleciendo la capacidad de empatía e identificación.
Ejemplo literario: «El extraño caso del Dr. Jekyll y Mr. Hyde», de R. L. Stevenson
El lector no solo siente miedo, sino también compasión por Jekyll. Al reconocer que todos tenemos sombras internas, se genera una resonancia afectiva. Llorar por un personaje oscuro también libera oxitocina.
Stevenson, R. L. (1886). El extraño caso del Dr. Jekyll y Mr. Hyde. Traducción de A. Valdés (2011). Madrid: Alianza Editorial.
Aplicaciones biblioterapéuticas
- Aceptación de la sombra personal (Jung).
- Exploración de la dualidad moral y emocional.
- Desarrollo de la autocompasión y la integración identitaria.
Estructura molecular de la oxitocina, neurohormona relacionada con el apego, la empatía y el vínculo emocional, liberada al conectar profundamente con los personajes de una historia.
Cortisol: el estrés que se disuelve en las palabras
El cortisol es una hormona esteroidea que se libera en respuesta al estrés. En niveles elevados, puede afectar negativamente el sueño, la inmunidad y la salud emocional. Sin embargo, se ha comprobado que leer reduce significativamente los niveles de cortisol, generando una sensación de calma y seguridad (Bear, Connors & Paradiso, 2008).
Ejemplo literario: «El almohadón de plumas», de Horacio Quiroga
Aunque es un cuento inquietante, su lectura permite al lector liberar tensiones internas proyectadas en el relato. Esa catarsis emocional calma el sistema nervioso.
Cuento:
Quiroga, H. (1917). El almohadón de plumas. En Cuentos de amor de locura y de muerte. Buenos Aires: Biblioteca Ayacucho.
Aplicaciones biblioterapéuticas
- Catarsis guiada: liberar tensiones a través del relato ajeno.
- Tolerancia emocional: entrenar la resiliencia frente al conflicto.
- Normalización del dolor: reconocer el sufrimiento como experiencia humana compartida.
Aplicaciones terapéuticas de la biblioterapia
La biblioterapia guiada permite seleccionar lecturas que generan resonancia emocional, identificación y catarsis. Estas lecturas no solo estimulan procesos mentales complejos, sino que también modulan la química cerebral, calman el sistema nervioso y favorecen la recuperación emocional.
Se aplica especialmente en:
- Trastornos de ansiedad y estrés crónico.
- Procesos de duelo, trauma o separación.
- Contextos de vulnerabilidad: hospitales, cárceles, hogares de acogida.
Estructura molecular del cortisol, hormona del estrés que disminuye durante la lectura profunda, facilitando la calma, la introspección y la regulación emocional.
Conclusión
Leer no solo educa: transforma. Cada página leída con emoción genuina puede modificar nuestra fisiología, ayudarnos a sentirnos mejor y permitirnos reconectar con lo más íntimo de nosotros mismos. En ese cruce entre lenguaje y emoción, la biblioterapia abre un camino natural, accesible y profundamente humano para sanar.
«Todo hombre puede ser, si se lo propone, escultor de su propio cerebro.» Ramón y Cajal (1897)
Referencias:
Bear, M. F., Connors, B. W., & Paradiso, M. A. (2008). Neurociencia: la exploración del cerebro (3.ª ed.). Lippincott Williams & Wilkins.
Borges, J. L. (1947). La casa de Asterión. En El Aleph (pp. 91–93). Buenos Aires: Emecé.
Dehaene, S. (2014). El cerebro lector: Cómo aprendemos a leer y qué puede enseñarnos la ciencia. Madrid: Siglo XXI Editores.
Immordino-Yang, M. H. (2011). Las emociones, el aprendizaje y el cerebro: implicaciones educativas de la neurociencia afectiva. Fundación Telefónica / Harvard Education Press.
Quiroga, H. (1917). El almohadón de plumas. En Cuentos de amor de locura y de muerte. Buenos Aires: Biblioteca Ayacucho.
Lembke, A. (2022). Generación dopamina: Cómo encontrar el equilibrio en la era del goce desenfrenado. Grijalbo.
Román, A. M. (2019). Imaginarios sociales de exreclusos sobre la lectura y el sentido de la vida: la función de la biblioterapia en personas privadas de su libertad (tesis doctoral). Universidad Argentina John F. Kennedy, Argentina
Stevenson, R. L. (1886). El extraño caso del Dr. Jekyll y Mr. Hyde. Traducción de A. Valdés (2011). Madrid: Alianza Editorial.
Cómo citar este artículo:
Román, A. M (2025) Dopamina, Oxitocina y Cortisol: química en las emociones lectoras [Día Mes, Año de la consulta on line]
