Como biblioterapeuta usted forma parte de un equipo interdisciplinario perteneciente al departamento del área clínica de un hospital público orientado a la atención primaria, al cual concurren personas con diferentes trastornos de origen psicológico. En función de cierta experiencia su equipo y usted han encontrado que fundamentalmente existen dos grandes tipos de trastornos que representan a casi el total de los enfermos que concurren al hospital. Los trastornos cuya característica principal es una alteración del humor (del 1 al 5 inclusive) y los trastornos de ansiedad (del 6 al 10 inclusive).
La consigna es la siguiente:
1 – elegir solo un trastorno de uno de estos dos grande grupos.
2 – recomiéndele una lectura que podría serle apropiada desde la biblioterapia, considere que el paciente pueda desarrollar las tres etapas de la biblioterapia: Identificación, Catarsis e Introspección.
3 – fundamente brevemente su elección.
Por ejemplo:
1 – Fobia social.
2 – «El guardián entre el centeno» de J.D. Salinger.
3 – Fundamentación: el tema principal de la novela es la crítica hacia la hipocresía de las personas y de la sociedad. La rebeldía que expresa el protagonista principal, facilita que la identificación de una persona con un trastorno fóbico permita lograr una catarsis, depurando emociones inhibidas y otorgando una capacidad de introspección de aspectos psíquicos que en contraste pudieran traslucir la dificultad del trastorno aportando una óptica diferente al paciente de su propia patología.
Lectura sugerida previa a la realización del formulario
A partir del recorrido realizado es posible pensar en una definición de biblioterapia:
Y siguiendo esta línea, encontraremos tres etapas fundamentales: Identificación, Catarsis e Introspección.
La identificación es un proceso psicológico mediante el cual el individuo acepta un atributo de otro y se transforma total o parcialmente, según el modelo de ese otro.
La catarsis es entendida como el proceso de pacificación, serenidad y alivio de las emociones
EL introspección determina hasta qué punto una persona tiene capacidad de comprenderse mejor a sí misma, de hacer conexiones entre su vida y las circunstancias de su vida.
Fue Borges quien dijo: “De los diversos instrumentos del hombre, el más asombroso, es sin duda, el libro. Los demás son extensiones de su cuerpo. El microscopio, el telescopio, son extensiones de su vista; el teléfono es extensión de la voz; luego tenemos el arado y la espada, extensiones de su brazo. Pero el libro es otra cosa: el libro es una extensión de la memoria y de la imaginación”
La biblioterapia, como recurso terapéutico, puede ser abordado, por la psicología existencialista, desde allí ofrece al terapeuta la posibilidad de facilitar y proporcionar un recurso -el libro, la lectura- que no es invasivo y que puede provocar situaciones que puedan servir a la finalidad de crecimiento personal. En este sentido, su campo de aplicabilidad trasciende el uso personal y permite instalarse dentro de comunidades vulnerables que padecen neurosis noógenas, o de falta de sentido de la vida.
Es por eso que de acuerdo con Gomez (2017) “La lectura debe ser entendida como el camino hacia un conocimiento más profundo del ser humano y no sólo como una actividad que eduque en el sentido estricto de la adquisición de conocimientos sin relevancia en la construcción cognoscitiva y emocional del sujeto” (pág 8.)
Para Viktor Frankl, esta actividad posee un alto valor terapéutico ya que realmente es capaz de afectar positivamente la vida de los lectores y tener un impacto real en ella.
Desde la Biblioterapia la literatura obtiene entonces un papel más trascendente que el que habitualmente se le asigna, pues al deleite estético que busca producir en el lector, debe sumársele la búsqueda de la salud psíquica. Esto se explica porque la literatura incita al lector a cuestionarse sobre el sentido de su propia existencia. Las peripecias por las que atraviesan los personajes de las obras literarias fuerzan al lector a la reflexión sobre la propia vida. Este, identificándose con un personaje, o al comprender las frustraciones o dificultades por las que atraviesa alguno de ellos, no puede evitar pensar sobre la propia vida, sobre el rumbo que esta lleva y sobre el sentido de su propia existencia.
En palabras de Frankl:
“La literatura moderna no precisa continuar siendo tan sólo un síntoma más de las neurosis de masas de hoy día. Puede contribuir también a la terapéutica. Los escritores que han atravesado el infierno dedesesperación, que han experimentado la aparente carencia de sentido de la vida, pueden ofrecer su sufrimiento, como un sacrificio, en el altar del género humano. Sus revelaciones ayudarán al lector que sufra idéntico estado a superar este último.“
Viktor Frankl
Finalmente podemos afirmar que la lectura ayuda a recuperar el sentido de vida del hombre y la Biblioterapia posibilita el desarrollo de la dimensión espiritual del hombre.
Bibliografía
- Frankl, V. (1995). La psicoterapia al alcance de todos. Barcelona: Herder.
- Frankl, V. (2003). Ante el vacío existencial: hacia una humanización de la psicoterapia. Barcelona: Herder.
- Frankl, V. (2012). Psicoterapia y humanismo. México: Fondo de Cultura Económica.
- Gómez C. (2017). La lectura como terapia alternativa en la recuperación de mujeres sobrevivientes del cáncer. Universidad Veracruzana. Centro de Estudios de la Cultura y la Comunicación. Xalapa, Veracruz. México
- Losada, A. V. (2020). La biblioterapia como recurso terapéutico interdisciplinario. Revista de Psicología, 19(1), 210-221. doi: 10.24215/2422572Xe05
- Román, A.M. (2019). Imaginarios sociales de exreclusos sobre la lectura y el sentido de la vida: la función de la biblioterapia en personas privadas de su libertad (tesis doctoral). Universidad Argentina John F. Kennedy, Argentina.
- Román A,M. (2020). Revisión sistemática de artículos sobre biblioterapia y el sentido de la vida. Calidad de vida y salud, Vol. 13, No. Especial; 114-129. Universidad de Flores (UFLO)
- Román, A.M. (2019). Definición de biblioterapia, [03 Septiembre, 2020] https://antonioroman.info/que-es-la-biblioterapia/